REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

PODER JUDICIAL
Tribunal Sexto de Municipio Ordinario y Ejecutor de Medidas del Municipio Iribarren de la Circunscripción Judicial del Estado Lara
Barquisimeto, veinticuatro de enero de dos mil veinticuatro
213º y 164º


ASUNTO: KP02-V-2023-003066
DEMANDANTE: JOSE ANTONIO MEZA ALDAZORO, venezolano, mayor de edad, titular de la cédula de identidad número V-16.139.884.-
ABOGADO ASISTENTE DE LA DEMANDANTE: ALEXANDER JOSE RIVAS NUÑEZ, inscrito en el I.P.S.A bajo el N°136.051.-
DEMANDADO: REINALDO EMILIO MEZA MARTINEZ, venezolano, mayor de edad titular de la cédula de identidad, N°. V-3.051.751.-
ABOGADO ASISTE DEL DEMANDADO: por el Abg. ADELYS RODRIGUEZ, inscrito en el I.P.S.A bajo el N° 147.102, inscrito en el I.P.S.A bajo el N° 147.102.
MOTIVO: RECONOCIMIENTO DE DOCUMENTO PRIVADO.
SENTENCIA: DEFINITIVA.-
I
NARRATIVA
Se inició el juicio mediante libelo de demanda presentada en fecha 20/12/2023, por ante la Unidad de Recepción y Distribución de Documentos del Circuito Civil de Barquisimeto, y previo el sorteo de ley correspondió conocer de la causa a este Juzgado.-

Por auto de fecha 22/12/23, se admitió la presente demanda, por no ser contraria a las buenas costumbres al orden público o alguna disposición expresa en la Ley, y se ordenó el emplazamiento de la parte demandada, el ciudadano REINALDO EMILIO MEZA MARTINEZ, para que compareciera en el lapso correspondiente a dar contestación a la demanda.-

En fecha 17/01/2024 comparece el ciudadano REINALDO EMILIO MEZA MARTINEZ, venezolano, mayor de edad titular de la cédula de identidad, N°. V-3.051.751 asistido por el Abg. ADELYS RODRIGUEZ, inscrito en el I.P.S.A bajo el N° 147.102, acude a los fines de darse por notificado en la presente demanda en todas y cada una de las partes en consecuencia reconocen el Contenido y Firma del Documento Privado, que en su contra ha intentado el ciudadano JOSE ANTONIO MEZA ALDAZORO, venezolano, mayor de edad, titular de la cédula de identidad número V-16.139.884, en tal sentido, reconozco el contenido, firma y huellas digitales del mismo y solicito a su vez se dicte sentencia en la presente causa”; acordando éste Tribunal agregarlo a los autos para que surta los efectos correspondientes y se da por terminado el presente asunto.-
II
MOTIVACION PARA DECIDIR
En primer lugar es necesario ahondar un poco en cuanto a lo que la normativa legal y doctrina han establecido referente al reconocimiento de documento privado, por tal motivo prevé el artículo 450 del Código de Procedimiento Civil, que el instrumento privado puede ser reconocido a través de demanda principal, la cual deberá tramitarse por los cauces del procedimiento ordinario.-
Con respecto a los límites tanto de la pretensión como de la contestación en causas como la de marras, el autor Ricardo Henríquez La Roche, en su obra “Código de Procedimiento Civil”, Tomo III. Segunda Edición. Ediciones Líber. Caracas, 2.004, pp. 456 y 457, apuntó lo siguiente:
1. Al igual que en la acción principal de tacha de falsedad (Art. 440), la demanda de reconocimiento de firma postula una pretensión mero declarativa…El juicio discurre según la norma, por el procedimiento ordinario. El reo debe en la contestación a la demanda, limitarse a reconocer o desconocer la firma. Si la reconoce, se allana a la demanda…Si por el contrario, el demandado desconoce la firma (sea suya o de un causante o representante suyo) en el acto de contestación a la demanda, la instrucción de la causa quedará circunscrita a demostrar, a través del peritaje caligráfico, que la firma si es auténtica.
2. En semejantes condiciones, el no menos reconocido jurista Emilio Calvo Baca, en su obra “Código de Procedimiento Civil de Venezuela”, Tomo IV. Ediciones Libra. Caracas, 2.000, pp.396 y 397, señaló lo siguiente: La demanda pidiendo el reconocimiento privado, debe cumplir con los requisitos señalados en el artículo 340 Código de procedimiento civil, el accionado en su contestación, deberá limitarse a reconocer o a desconocer la firma, si la reconoce termina la litis, si, en cambio la desconoce, la parte demandante asume la carga de la prueba de la autenticidad del instrumento…”
La actuación de las partes en casos como el que nos ocupa, debe girar únicamente en torno al hecho del reconocimiento o desconocimiento de la firma plasmada en el documento, de allí, que no le es dado a las partes discutir en el transcurso del proceso, consideraciones de fondo inmanentes al documento objeto de la pretensión, razón por la que el procesalista Ricardo Henríquez La Roche, tal como se desprende de la cita que antecede, afirmó que la demanda postula una pretensión mero declarativa, pues, en criterio de esta sentenciadora, el artículo 444 del Código de Procedimiento Civil, no prevé otra circunstancia fáctica, que el reconocimiento o el desconocimiento de la firma plasmada en el documento mismo, quedando así circunscrita igualmente la actividad del Órgano Jurisdiccional, a declarar reconocido o no el instrumento en cuestión.”
Antes de pasar a decidir es importante hacer las siguientes consideraciones doctrinales: El reconocimiento es la declaración o confesión que hace el emplazado de alguna obligación a favor de otro, o de algún instrumento privado que otorgó y tiene por objeto hacer que los instrumentos tengan plena validez en el juicio a promoverse o en el promovido si se pide dentro del juicio. Reconocido un instrumento privado, o si se declara debidamente reconocido, tiene para las partes y sus sucesores las mismas consecuencias y eficacia que un instrumento público. El reconocimiento es indivisible y tiene la misma fuerza contra el reconocedor y contra el presentante del instrumento. Es expreso cuando lo hace el obligado y tácito cuando se manda dar por reconocido en rebeldía o silencio de la parte.
Ahora bien, en el caso bajo estudio, la parte actora interpuso la demanda a fin de que el ciudadano REINALDO EMILIO MEZA MARTINEZ, ya antes identificado, reconociera en su contenido y firma el documento privado y con fundamento en lo establecido en el artículo 450 del Código de Procedimiento Civil, donde se marcan las pautas procesales para la debida tramitación del caso en comento, se remite al juicio ordinario, establecido en el artículo 444 y 448 del citado Código Adjetivo citado, por lo que el tramite habido se encuentra ajustado a derecho. Y ASI SE DECLARA.-
De igual manera, debemos tener en cuenta que el reconocimiento es la declaración o confesión que hace el emplazado de alguna obligación a favor de otro, o de algún instrumento privado que otorgó y tiene por objeto hacer que los instrumentos tengan plena validez en el juicio a promoverse, o en el promovido si se pide dentro del juicio.-
Cuando el instrumento privado se produce con el libelo de demanda, la oportunidad para su desconocimiento es en el acto de contestación de la demanda, sin embargo, si la parte no hace uso de su derecho a desconocer el documento, o si lo hizo extemporáneamente y precluyó su oportunidad procesal, se entiende que el instrumento ha sido reconocido tácitamente. El Tribunal Supremo de justicia, en sentencia reiterada, ha sentado el concepto de documento privado en los siguientes términos:
“…Como es de doctrina, en la expresión: “instrumentos o documentos privados” se comprenden todos los actos o escritos, que emanan de las partes, sin intervención del registrador o de algún otro funcionario competente -requerida en el documento público o auténtico- y que se refieren a hechos jurídicos a los cuales pueden servir de prueba; y la condición esencial de la existencia de todo documento privado es la firma estampada en él de la persona a quien se opone. Con esa especie de documento pueden pues, probarse todos los actos que la ley no requiera su constancia en documento público, o no revista de solemnidades especiales; documentos esos que sólo tienen validez si son reconocidos o tenidos legalmente por tales.” (Sentencia de fecha 26 de mayo de 1952).
En este orden de ideas, se observa que el demandado reconoció el contenido y la firma del documento anexado al libelo, por tal motivo este Juzgador considera necesario declarar reconocido el documento objeto de la presente acción, de conformidad con lo establecido en el artículo 444 del Código de Procedimiento Civil. -
III
DISPOSITIVA
Por todos los razonamientos anteriormente expuestos este Tribunal Sexto de Municipio Ordinario Ejecutor de Medidas del Municipio Iribarren de la Circunscripción Judicial del estado Lara administrando Justicia en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por Autoridad de la Ley, y con base en los artículos 444 y 450 del Código de Procedimiento Civil, DECLARA CON LUGAR LA DEMANDA DE RECONOCIMIENTO DE INSTRUMENTO PRIVADO incoada por el ciudadano: JOSE ANTONIO MEZA ALDAZORO, contra del ciudadano REINALDO EMILIO MEZA MARTINEZ,, (ampliamente identificado en el fallo). En consecuencia, se declara reconocido el presente documento:

“Yo, REINALDO EMILIO MEZA MARTINEZ, venezolano, mayor de edad, soltero, titular de la cédula de Identidad No. V-3.051.751, por medio de este Documento declaro que: Doy en Venta Pura Y Simple Perfecta e Irrevocable al ciudadano JOSE ANTONIO MEZA ALDAZORO, venezolana, mayor de edad, casada, titular de la cédula de Identidad No. V- 16.139.884, un inmueble de mi única y exclusiva propiedad el cual se encuentra ubicado en el Asentamiento Campesino El Cuji, Jurisdicción del Municipio Autónomo de Iribarren del Estado Lara, constituido por un lote de terreno, y las bienhechurías sobre el construidas, el cual tiene una superficie de MIL TRESCIENTOS DOS METROS CUADRADOS CON OCHENTA Y CUATRO DECIMETROS (1302,84 Mts), dicho inmueble se encuentra alinderado de la siguiente manera: NORTE: En Línea de 26,70 Mts con Avenida La Palma que es su frente; SUR: En Línea de 26,18 Mts con Primitivo López, ESTE: En Línea de 39,83 Mts con Reinaldo Emilio Meza y OESTE: En Línea de 48,64 Mts con María Palma Mendoza, dicho inmueble pertenecía a uno de mayor extensión, según se desprende de División de Parcela emitida por la Alcaldía del Municipio Iribarren del Estado Lara, con resolución N° 122-2023, de fecha 07 de Noviembre de 2023, así mismo dicho inmueble posee el siguiente código Catastral 13-03-03-001-805-0094-026-000, Dicho inmueble me pertenece según consta en documento debidamente Registrado por ante la Oficina Subalterna Del Primer Circuito de Registro del Distrito Iribarren hoy en día Municipio Iribarren del Estado Lara de fecha 15 de Julio de 1.996 quedando anotado bajo el número 23 Folios 1 al 4 vto Protocolo 1º Tomo 2°. El precio de venta del inmueble antes determinado, es la cantidad de DOS MIL BOLIVARES (Bs.2.000), los cuales declaró recibir a mi entera y cabal satisfacción según se desprende de transferencia Bancaria con número de referencia49906878, del Banco de Provincial. El inmueble objeto de esta venta se encuentra libre de todo gravamen y solvente de todo impuesto municipal, nacional o estatal, Con el otorgamiento del presente documento se efectúa la tradición legal del inmueble vendido. Y yo, JOSE ANTONIO MEZA ALDAZORO, plenamente identificado anteriormente, declaro que: acepto la venta en cada uno de los términos expuestos por este instrumento. En Barquisimeto a los 15 días del mes de Diciembre.”

No hay condenatoria en costas dada la naturaleza de la decisión de conformidad con lo previsto en el artículo 283 del Código de Procedimiento Civil.-
PUBLÍQUESE, REGÍSTRESE Y DÉJESE COPIA CERTIFICADA, del presente fallo, de conformidad con lo establecido en el artículo 248 del Código de Procedimiento Civil.
Dada, sellada y firmada en la Sala de Despacho del Tribunal Sexto de Municipio Ordinario y Ejecutor de Medidas del Municipio Iribarren de la Circunscripción Judicial del Estado Lara. En la ciudad de Barquisimeto, a los veintidós (24) días del mes de Enero de 2.024. Años: 212º de la Independencia y 164º de la Federación.-
El Juez,



Abg. Hilarión Antonio Riera Ballestero. El Secretario Temporal,



Abelardo Jesús Gelvis Ramírez



HARB/AJGR/EM.-